Merry Chris...is

A sólo una semana para que la Navidad entre en nuestras casas, como dice la canción "la vida sigue igual".

 

Siguen los problemas para muchas familias, todo está mas caro y una temida subida de la luz está al acecho en enero #Tarifazodelaluz

 

No es que sea negativa, pero son tiempos malos para la lírica y hablar de una navidad dulzona porque compremos turrones y de felicidad fácil porque intentemos demostrar nuestro cariño comprando cosas materiales en un escenario donde mucha gente lucha por sobrevivir, me parece irresponsable.

 

Vivir en los espejismos de tiempos pasados no es bueno, ahora la situación aprieta aunque se siga vendiendo ese paquete de felicidad del que todos debemos formar parte y que al final no es mas que la mecha que enciende la pólvora.

 

Con el tiempo te das cuenta que hoy ríes pero que mañana puedes llorar, que nada es para siempre, a lo mejor ni hasta para los políticos las cosas serán iguales, aunque si cobrásemos 6.000 euros al mes y tributásemos como un mileurista, el turrón nos sentaría mejor.

 

Mi fibra sensible son los niños ¡Quien lo iba a decir!, nunca me gustaron, pero ser madre me ha hecho descubrir un sentimiento que desconocía, ver sufrir a los niños me encoje el alma, porque ellos son los que traen la ilusión, ellos te hacen bonita la navidad.

 

Tenemos dos opciones, o sufrimos de manera indecible o sólo lo imprescindible, así que habrá que afrontar con buena actitud estas fechas que vienen y desear que vengan mejores tiempos para todos.

 

¡Nos queda la ilusión del "Gordo de navidad"! Pero si no lo sabéis, está a dieta, porque si te tocan más de 2.500 euros de premio, nuestro Ministro de Hacienda, el Sr Montoro se lleva un 20%.  ¡Todo sea por reducir el déficit público!

Tenemos que ir haciéndonos a la idea que el papá Estado no existe y solo vela por sus intereses, Debemos ir pensando en hacernos mayores. 

 

Nos conformaremos con la lotería de los pobres, la salud, ahora, que yo firmo.

 

           ¡¡¡FELIZ NAVIDAD!!

Un gran hombre.

Hablar de Nelson Mandela hoy es difícil, en estos días se ha dicho ya todo lo que se podía decir de él.

 

Pero me gustaría hacer mi pequeña aportación en mi humilde blog, porque cuando muere un hombre como Mandela hay un antes y un después en la historia.

 

¿El color de la piel marca el destino de cada uno? En su caso sí, porque él vivió un racismo institucionalizado (el apartheid), la ley decía que había que ser racista, estaban los ciudadanos de primera que eran los blancos y los de segunda que eran los negros.

 

Mandela luchó contra la segregación de la raza negra en Sudáfrica, por la igualdad y la dignidad, esa fue su lucha.

 

Un tercio de su vida, 27 años, los pasó desterrado en la cárcel, en el "alcatraz de Sudáfrica", un lugar aislado donde su rutina era realizar trabajos forzosos, de allí salió sereno y con la mente fija en su misión, que era reinventar África.

 

Fue un guerrero que con su lucha cambió el destino de mucha gente y de un país dividido por el conflicto social y es que hay personas que marcan diferencias.

 

¡Quería igualdad de oportunidades para todos! todos tenían que tener luz, tenían que comer, tenían que recibir educación y asistencia médica y un hombre = un voto.

 

Deja enseñanzas no sólo para África, sino para el mundo entero, era leal a su pueblo.

 

La genialidad que hizo en la final de la "Copa del Mundo de Rugby" en 1995 portando la camiseta de la gacela, solo un hombre sobresaliente la puede hacer, hizo que la Sudáfrica negra y la blanca se unieran bajo la misma bandera.

 

Cuando su maestro de primaria le puso el nombre de "Nelson", no sabía que este hombre de mirada serena y sonrisa afable cautivaría al mundo. Su mano estrechó a ricos y pobres y decía que siempre él tenía que estrecharla primero y no esperar a que los demás lo hicieran.

 

Necesitaríamos muchos grandes hombres como él, nos iría mejor, muchos Presidentes y políticos deberían aprender de su legado :

                 "Una nación no debe juzgarse por cómo trata a sus ciudadanos con mejor posición, sino por cómo trata a los que tienen poco o nada”. (Nelson Mandela)

Los discípulos son la biografia del maestro.

Tenemos un hermoso y largo puente a la vuelta de la esquina, yo diría que es hasta cansino y aquí en mi patria chica, como me gusta decirlo, en Mérida, el puente es un acueducto, los niños terminan el cole el jueves y empiezan el miércoles siguiente porque celebramos el día 10, el día de nuestra patrona, la mártir Santa Eulalia.

 

Que mi hijo no tenga cole hasta casi una semana después es normal y me alegra por él, pero que Extremadura esté en la cola de las comunidades que peores resultados sacan sus alumnos según el Informe Pisa me entristece.

 

¿Será culpa de las políticas educativas? ¿Hay programas de mejora académica (planes de lectura, bilingüismo, ley de autoridad, bachillerato de excelencia...)?.

 

La última reunión que tuve en el colegio de mi hijo comenzó con una lectura, nos leyeron  el Real Decreto 1630/2006 por el que se establecen las enseñanzas mínimas del segundo ciclo de Educación Infantil y donde dice que uno de los objetivos es iniciarse en la lecto-escritura.

 

En definitiva, que no hay una obligación por parte del profesor a enseñar a tu hijo a leer y escribir.

 

¡Como no vamos a estar en la cola!.

La educación es algo fundamental para la sociedad presente y futura de España, es el indicador más claro de evolución, esfuerzo y calidad de la misma. Porque afianza el presente y apuesta por el futuro.

 

El problema es que la educación sigue siendo el arma arrojadiza de los políticos, con gobierno nuevo habrá ley nueva, es necesario cambiar la mentalidad y las dinámicas de enseñanza.

 

Al margen de las leyes, políticos e informes me gustaría que hubiese docentes con paciencia, dedicación, que tuviesen altas expectativas y motiven, que tengan actitud positiva para resolver los problemas, porque ser el responsable de moldear las mentes de los estudiantes para sus pensamientos del futuro, es algo muy importante.

 

Siempre se ha dicho que los mejores profesores son aquellos que saben transformarse en puentes y que invitan a sus discípulos a franquearlos.